Abejas locales encuentran un segundo hogar en el Solsonès

Viladecans lleva años haciendo una ciudad más amable y sensibilizada con las abejas, clave para la polinización y en peligro de extinción.

De la mano de la asociación catalana Amigos de las Abejas y dentro de la iniciativa Redicat, Viladecans ha trasladado al municipio de Riner una colmena con 20.000 abejas. Ambos ayuntamientos participan en la iniciativa para concienciar del papel de las abejas en la biodiversidad y sumar para su conservación. 

Hace un tiempo se pusieron unas cajas nido en varios puntos de Viladecans, que apadrinaron alumnos de 5º de la Escuela Miquel Martí i Pol. Y, coincidiendo con la floración de los almendros y el momento en que las abejas reinas buscan nuevos espacios, los mismos alumnos de la escuela Miquel Martí i Pol los trasladaron a Riner, donde realizaron varias actividades para conocer mejor las abejas.

Para la teniente de alcalde Encarna García, la actuación también sirvió para conectar el mundo urbano, con Viladecans, como ciudad de 67.800 habitantes y 20 km², y el rural, con 260 habitantes y 40 km², puesto que, tal como indica, "Nos dimos cuenta que vivimos muy diferente la biodiversidad en la ciudad a cómo la viven los alumnos de un micropueblo, en este caso de Riner". A la vez que añade que, "El conocimiento que se pueden transmitir los niños y niñas, tanto de Riner como de Viladecans, teniendo como eje vertebrador el cariño y el amor para salvar las especies, pensamos que es impagable". 

Hoy, 18 de abril, se ha hecho el retorno, y los 25 alumnos de la escuela de Riner han visitado Viladecans, que junto con los alumnos de aquí han realizado diferentes actividades relacionadas con el mundo de las abejas.