Luz verde a un nuevo contrato de limpieza viaria y recogida de residuos

El servicio municipal de limpieza viaria y recogida de residuos se encamina hacia un cambio de gran calado. La Junta de Gobierno Local aprobó el 29 de marzo las condiciones de un nuevo contrato que estará vigente durante una década, previsiblemente a partir del otoño. Este mes de abril está previsto ya abrir el concurso para buscar qué empresa prestará los trabajos.

Más inversión y compromiso

El Ayuntamiento destinará más inversión al servicio. El nuevo contrato podría llegar a alcanzar un coste de 14,7 millones de euros anuales cuando estén todas sus fases implantadas (a partir de 2030), mientras que ahora alcanza los 6,3 millones y en 2012 era de 4,7.

El actual contrato ha estado marcado por las condiciones de su adjudicación en 2011 –con las cuentas públicas con el cinturón apretado tras la crisis de 2008– y por la limitación legal para su ampliación, que han impedido mejorar el servicio durante los últimos años pese a querer hacerlo. El renovado servicio incrementará la limpieza viaria e impulsará un nuevo modelo de recogida selectiva para alcanzar las metas obligadas por la Unión Europea, de las que actualmente se está muy lejos, con el objetivo de reducir drásticamente los residuos que se envían a vertedero, que junto a los envases son los más contamienantes.

Asimismo, se incorporarán vehículos menos contaminantes y eléctricos, que junto a los resultados del servicio deben contribuir al objetivo de que Viladecans sea neutra en emisiones de CO2 para 2030. Además, el nuevo contrato incorporará medidas sociales para que la recogida de algunos residuos (trastos viejos, aceites de cocina y ropa) la realicen empresas de inserción laboral de personas vulnerables, así como para fomentar la paridad de género entre la plantilla del servicio.

El servicio de limpieza tendrá un aumento de personal, frecuencia y maquinaria.
L'equip de retirada d'herbes, efectuant el sevei a l'Alba-rosa

Por unas calles más limpias

Respecto a la limpieza de las calles, habrá un importante incremento del servicio ordinario, con más personal, rutas, frecuencia o equipos específicos destinados a tareas concretas.

Asimismo, se contará con más maquinaria de apoyo y se podrá baldear con agua las calles durante todo el año –actualmente solo se hace en verano–, siempre que no haya una situación de sequía que lo impida.

Además, la limpieza del interior de contenedores será más habitual, legando a ser semanal en los de orgánica.

Vehicle del servei de residus buidant contenidors de reciclatge

INCENTIVAR EL RECICLAJE

No obstante, quizás la gran transformación del servicio sea la del sistema recogida de residuos. Ahora, Viladecans está en los puestos de cola entre los municipios metropolitanos en reciclaje: apenas uno de cada tres kilos cuando la obligación es llegar a dos de cada tres en 2035 para reducir las emisiones de efecto invernadero. Para lograr ese objetivo, y evitar así sanciones a las arcas públicas, se buscará una mayor responsabilidad ciudadana con la reducción y la separación de los residuos.

Para ello el servicio cambiará el modelo de recogida por uno más individualizado, que será diferente según las zonas y se irá extendiendo por los diferentes barrios a partir de 2025, cuando se cuente con la maquinaria adaptada para ello.

El objetivo de estas medidas es no sólo incentivar sino también poder premiar el reciclaje correcto, como establece la nueva ley de residuos de Catalunya. Esta obliga también al Ayuntamiento a crear una tasa especíca para el servicio que cubra su coste en la que se po- drán aplicar estos beneficios.

Europa obliga a doblar el reciclaje actual, para lo que se impulsará otro modelo de recogida.

Recogida de trastos a domicilio

Con el nuevo contrato, se modicará el modelo de recogida de trastos viejos y muebles, así como los de restos de posa, que se realizarán a domicilio en un día y hora pactados. El objetivo será minimizar la presencia de voluminosos en las calles y, también, aumentar la reutilización o reacondicionamiento de los residuos para favorecer un modelo más circular y menos contaminante. Además, se instalarán en la vía pública puntos de recogida de aceite de cocina usado.