El Ayuntamiento arranca julio con las obras de una pista polideportiva cubierta en el patio de la Escuela El Garrofer. La actuación mejorará las instalaciones de la escuela y, a su vez, generará un nuevo espacio en el barrio del Eixample para el uso de entidades deportivas y la celebración de actividades culturales y lúdicas sin depender de las inclemencias del tiempo.
La nueva instalación, que estará terminada la próxima primavera, ocupará cerca de un millar de metros cuadrados del patio, que ahora tienen tierra de sauló. La pista será de hormigón, tendrá unos graderíos en cuatro niveles y contará una pérgola metálica para protegerla del sol y la lluvia. Además, tendrá un pequeño porche en el lateral más próximo al acceso de la calle como espacio de espera a resguardo.
La actuación, con un coste de 1,8 millones de euros y con subvención del Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE) con el programa FEDER, reformará también el edificio del gimnasio anexo, para garantizar su aislamiento y eficiencia energética, así como renovar los vestuarios.
Un proyecto sostenible y educativo
Dentro del plan municipal para potenciar la generación propia de energía eléctrica, la cubierta incorporará placas fotovoltaicas. Así, además de contribuir a la transición energética local, la instalación también será un recurso didáctico para promover la sostenibilidad entre el alumnado, que podrá experimentar el valor de generar energía en su escuela a partir del análisis de los datos.
En julio se para el Pati Obert
Con motivo de los primeros trabajos de las obras, la Escuela El Garrofer suspende durante el mes de julio su participación en el programa Pati Obert, que ofrece a niños y jóvenes un espacio de ocio por las tardes de los fines de semana. La actividad se retomará con normalidad en septiembre.
