Viladecans denuncia la problemática del desperdicio alimentario acogiendo una comida popular de aprovechamiento que hace posible la recuperación de 500 kg de comida para 270 comensales

Fue una jornada festiva donde el acto central fue un almuerzo de aprovechamiento para 270 comensales, preparada por 47 voluntarios y voluntarias. La organización y preparación de la comida estuvo a cargo de la "Plataforma Aprofitem els Aliments" (PAA). Esta plataforma trabaja desde 2014 para reducir el desperdicio en todo el ciclo alimentario, desde la producción a la distribución, el consumo y la gestión de residuos. La organización de la comida también contó con la colaboración de 24 comercios de la ciudad, entre fruterías, verdulerías y hornos de pan.

La chef local Cèlia Martínez preparó con la ayuda de los voluntarios y voluntarias, entre los que se encontraban estudiantes del Instituto Miramar, un menú con los alimentos donados por estos comercios y con la espigolada que se hizo en los campos de Viladecans. Los asistentes pudieron degustar buñuelos de calabaza con brócoli, sopa fría de cereza con cogollo, ensaladas, tostadas con baba ganoush, arroz con verduras y postres con mermelada de melocotones y albaricoques.

Más allá de toda la comida que se cocinó, esta acción también tiene una importante vertiente ambiental y de aprovechamiento de recursos naturales, y más en el contexto de crisis climática y ambiental actual con perspectivas poco optimistas. Según la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura), entre el 33 y el 40 % de los alimentos que se producen para consumo humano se pierden en la transición del campo al plato, con todo el desperdicio de recursos que ello conlleva. En este sentido, los casi 500 kilos de alimentos recuperados el pasado 10 de junio, en el marco de la 5a muestra de entidades de cultura popular "Viu Can Batllori", evitaron la generación de 510 kg de CO2 y ahorraron 59.111 litros de agua (ya que todos los alimentos que se iban a tirar habían necesitado toda esta agua para ser cultivados, producidos y servidos en la mesa). El ahorro económico fue de 747 euros. El impacto es más que positivo: trabajo en comunidad, aprovechamiento de alimentos que iban a ser lanzados y una gran acción de sensibilización ciudadana.

Esta comida de aprovechamiento se inscribe en las acciones impulsadas desde el Pacto por el Clima de Viladecans, aprobado por el Pleno Municipal en febrero de 2022. Uno de sus seis ejes de actuación se centra en la reducción de la generación de residuos y la mejora de su aprovechamiento haciéndolos circular de nuevo. Otras iniciativas dentro de este eje del Pacto se dedican a incorporar nuevos sistemas de gestión de los residuos, fomentar la economía del reciclaje y sensibilizar a la ciudadanía y a las empresas sobre la importancia de minimizar la generación de residuos. Por otra parte, los otros temas que se trabajan desde el Pacto son la transición energética, la renaturalización de la ciudad, la movilidad sostenible y la gobernanza climática.

En este vídeo podréis ver todo el reportaje sobre la Comida de aprovechamiento.