El taller "El mundo de las abejas y el apicultor" se enmarca dentro del proyecto Bee Happy del que Viladecans forma parte y que consiste en utilizar a las abejas como bioindicadores de la contaminación en el municipio, puesto que, por medio del polen, la cera y la miel, se puede detectar la presencia de elementos contaminantes como metales o plaguicidas. Viladecans dispone de tres colmenas de abejas situadas en diferentes puntos de la ciudad para estudiar, vigilar y mejorar la calidad ambiental del municipio por medio de las abejas.
La actividad ha tenido lugar este domingo 28 de mayo en el parque de Mas Ratés y pretende concienciar a las familias sobre la importancia de las abejas. El apicultor Jaume Clotet, de la empresa Mel·lis, ha explicado el proceso que llevan a cabo las abejas para hacer miel y la manera en la cual interviene el apicultor en este proceso. Además, Clotet ha señalado algunos datos interesantes como por ejemplo, que existen 800 tipos de abejas diferentes, que el 75% de flores que polinizan son silvestres y el 40% árboles frutales y que en una colmena pueden llegar a vivir hasta 80.000 abejas.
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