La escuela El Garrofer aprovecha el final de la actividad educativa para repararse. Las obras se están realizando en las fachadas del edificio y cuentan con un presupuesto de 60.519 euros.
Se trata de un intervención de mantenimiento y reparación de algunos elementos que se habían deteriorado con el paso de los años. En concreto se está interviniendo en anomalías en la parte del hormigón haciendo un repicado de los elementos agrietados y una reparación. Y además, también está previsto utilizar pintura impermeabilizante en la parte de la estructura que queda a la vista para evitar humedades o filtraciones de agua en el interior del edificio.
Estas mejoras son el paso previo necesario para que se pueda realizar otra actuación para reducir el consumo energético. Según la 2ª teniente de alcalde de Medio Ambiente y Sostenibilidad, Encarna García, "estas obras son necesarias para una intervención importante de futuro. Intentamos hacer del Garrofer una escuela Passivhaus energéticamente sostenible, con un alto grado de confort, que esté de acuerdo con el medio ambiente y que sea económicamente viable y por ello se deben hacer mejoras para conseguir un edificio estanco sin fugas ni entradas para tender a un nivel de consumo cero ".
Las actuales obras de mejora que posibilitarán el futuro proyecto de consumo energético alargarán siete semanas y cuentan con la subvención del Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE) con el programa PAREER II.
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