La Fiesta Mayor de Invierno late con la cultura y la luz

Del 19 al 22 de enero

Con motivo del día de San Sebastián, patrón local, vuelve la Fiesta Mayor de Invierno en Viladecans. Esta está protagonizada un año más por las entidades de cultura popular locales. Este año, el programa estrena un espectáculo de fuego, el Fest’Infierno, a cargo de los Diablos. Este se suma al tradicional pasacalle de la Coordinadora de Entidades, que año tras año va añadiendo nuevos participantes. La cita, como siempre, acaba con un concierto-vermut organizado por Rudemón, que esta vez tendrá dos grupos musicales y que compartirá espacio con un mercado de artesanía organizado también por entidades locales al casco antiguo.

Otro de los platos fuertes de la Fiesta de Invierno es la trobada gegantera, que celebrará el primer cumpleaños de las figuras locales Àlex y Eulàlia con una amplia representación de collas invitadas de todo el territorio catalán. Otro clásico, el juego popular de preguntas sobre la ciudad de Viladecans organizado por la Colla del Mamut, tampoco faltará. Como tampoco lo hará el festival de narraciones orales Narracans, que ya está a las puertas de su primera década de vida y celebrará actualmente la novena edición. Los cuentos para niños y para adultos se escucharán este año en Can Xic, en lugar de la Biblioteca Municipal, que todavía continúa con las obras de rehabilitación de la fachada.

VILADECANS se enciende de nuevo

Si el año pasado su novedad supuso toda una descarga estimulante, este año el Festival Llamp aspira a encender la Fiesta de Invierno
todavía con más potencia y luz. El festival de artes lumínicas estrenado en 2021 por el Ayuntamiento busca consolidarse como un espacio de experimentación y goce familiar. Con seis instalaciones, dos de ellas con sello local, quiere sorprender al visitante haciéndolo interactuar con la luz.

REPENSAR LA CARRETERA DE SANT CLIMENT

La celebración incorpora también dos propuestas que beben de la historia local para mirar hacia el futuro. Por un lado, se podrá visitar el renovado edificio histórico de Ca'n Amat después de tres años de obras. Y, por otro lado, se organiza una fiesta popular para dar el pistoletazo de salida al proceso participativo para la pacificación del tráfico a la carretera de Sant Climent. Esta iniciativa quiere dar continuidad al proyecto para dar más espacio al peatón en la Rambla Modolell, que arrancará en febrero. Con el estreno del nuevo vial de cornisa en el barri de Llevant en la primavera, se desviará de manera natural mucho del tráfico que pasa por el barri del Molí-Ginestar y, por eso, el Ayuntamiento quiere dar más protagonismo al peatón en la carretera de Sant Climent a su paso por el barrio. La fiesta, que recogerá las propuestas ciudadanas para abordar las necesidades de la zona, contará con actividades familiares, así como dos itinerarios guiados por el barrio para poner en valor su historia.

Entrar en el futuro de la mano del pasado

No os sorprendáis que sea el mismo Joan Amat y Sala, el hacendado que a mediados del siglo XIX construyó Ca'n Amat como lo conocemos –y que en 1854 llegó a ser alcalde de la ciudad–, quién os dé la bienvenida en la reapertura de este edificio histórico desprendido de las obras de restauración y ampliación hechas por la Ajutament. El 21 y el 22 de enero se podrá descubrir con unas visitas teatralizadas cómo ha quedado el equipamento municipal, que a partir del próximo otoño exhibirá los fondos del Museo de Viladecans.

Las visitas, cada treinta minutos, permitirán conocer como la casa de la historia de la ciudad ha triplicado su superficie para acoger un museo moderno que sea un referente para no olvidar la historia del Delta del Llobregat. Habrá un pequeño obsequio como recordatorio para todas aquellas personas que se acerquen a una ocasión única. Los horarios y la forma de hacer la reserva se pueden consultar en la web y en el programa de mano.